Análisis: Dr Robotnik’s Mean Bean Machine (Mega Drive)

DR ROBOTNIK’S MEAN BEAN MACHINE

por Skullo

Este comentario proviene de la revista Bonus Stage Magazine número 21 (Especial Kinnikuman – Musculman) que puedes ver online o descargar gratuitamente aquí.

Título: Dr. Robotnik’s Mean Bean Machine (Europa y América) Puyo Puyo (Japón)
Plataforma: Mega Drive/Genesis
Número de Jugadores: 1 o 2 jugadores
Género: Puzle
Desarrolladora: Compile
Año: 1992 (Japón) 1993 (Europa y América)

El malvado Dr. Robotnik (Eggman para los puristas) siempre está ocupado creando trampas y enemigos para Sonic mientras busca las Esmeraldas del Caos para obtener poder ilimitado ¿siempre? Bueno, siempre no, a veces juega al Puyo Puyo o lo que es lo mismo, a Dr. Robotnik’s Mean Bean Machine.

Este juego no es más que el Puyo Puyo lanzado en Japón, modificado con personajes de la serie de animación de Sonic (principalmente añadiendo a Robotnik y otros robots) para venderlo como un juego relacionado con la franquicia estrella de Sega.

Curiosamente la versión de Super Nintendo también sufrió un destino similar cuando llegó a occidente, convirtiéndose en un juego de Kirby (Kirby Avalanche en USA y Kirby Ghost Trap en Europa) así que podíamos concluir que tanto Sega como Nintendo prefirieron ir a lo seguro y meter personajes propios en este juego, en lugar de dejar a los personajes originales (que tienen su encanto, pero también son bastante raros, para que negarlo).

Se puede estar a favor o en contra de esa decisión aunque realmente no importa mucho, gracias a que el juego en sí permanece inalterado y, la verdad, los personajes solo son un elemento decorativo y no influyen en la jugabilidad.

Versión japonesa del juego (Puyo Puyo)

Gráficos

Es un juego de puzle así que considero este apartado el menos importante de todos. Técnicamente cumple con su función, diferenciamos las diferentes bolas de colores perfectamente del fondo y todo lo demás no es excesivamente importante.

En la versión japonesa se muestra a nuestra protagonista y a sus enemigos teniendo conversaciones antes de cada partida, en esta versión solo veremos una ilustración de nuestro rival y una vez empezado el duelo veremos su cara sufriendo o riéndose de nosotros (según el resultado de la partida) que están bastante bien. Esas imágenes no son maravillosas, pero se agradece que estén ahí, y lo mismo se podría decir de las partes en las que vemos a Robotnik en su laboratorio.

En resumen, gráficamente el juego es colorido y agradable, los añadidos gráficos son simpáticos y no entorpecen el juego. No se le debe exigir más a un juego de puzle.

Gráficos simples y coloridos

Sonido

Melodías simpáticas y muy pegadizas, las vamos a estar escuchando durante horas así que es muy positivo que sean así. Sin embargo creo que debieron aumentar la variedad, ya que cuando jugamos contra la consola, en casi todas las partidas suena la misma melodía y puedes llegar a aburrirte (un mal común en muchos juegos de puzle).

Los efectos de sonido son bastante sencillos y solo destacan ligeramente las voces que se escuchan cuando eliminamos piezas y “atacamos al rival” con bolas negras.

Ilustración previa al combate

Jugabilidad

Aquí llegamos al apartado más importante, que afortunadamente este juego supera sin problemas, ya que los controles son sencillos pero sólidos y funcionales (cosa necesaria ya que en los últimos niveles el juego irá muy rápido).

Por si hay algún despistado que no sepa jugar a Puyo Puyo, explicaré su mecanismo de manera muy básica.

Este es el típico juego de puzle donde tenemos que agrupar bolas de un mismo color, si juntamos 4 o más desaparecerán y todas las bolas que estén encima caerán hacia abajo. Para prosperar en el juego tendremos que provocar que durante esa situación se continúen formando grupos de bolas del mismo color, creando cadenas o combos.

El motivo de esa necesidad es variado, por un lado vaciaremos la fase de bolas y evitaremos la parte superior de la pantalla (si, al igual que muchos otros puzles, si llegas al borde superior de la pantalla, pierdes) y por otro es la manera de vencer a los enemigos contra los que nos enfrentamos, ya que al ir eliminando bolas de colores y haciendo cadenas, a nuestro rival le caerán unas bolas negras (o piedras, o como les queráis llamar) que le entorpecerán a la hora de juntar bolas del mismo color. Dichas bolas negras desaparecen cuando juntas bolas de colores que estén a su lado. En la parte superior de la pantalla se nos muestra cual es la siguiente ficha (o grupo de bolas) que nos van a dar, es muy necesario estar atento a sus colores y pensar donde la colocaremos cuando aún estamos posicionando la pieza anterior, especialmente si queremos completar el juego en los niveles más difíciles.

Si tenéis dudas, el tutorial os explicará las reglas

Así pues, nuestra tarea es mover un grupo de 2 bolas y colocarlo en la parte inferior de la pantalla de manera que podamos ir eliminándolas con grupos de 4 o causar reacciones en cadena. Si tocamos los botones del mando veremos que las bolas giran, dándonos más posibilidades para colocarlas donde queramos. Si colocamos una de las bolas encima de otra, pero la segunda bola queda “volando” se despegará de su compañera y caerá hacia abajo.

En resumen, es muy fácil entender cómo se juega al juego, pero requiere mucha habilidad llegar a dominarlo para superar a los enemigos más difíciles. En cualquier caso, si perdemos la partida no será culpa del control.

Duración

Aunque los juegos de puzle basan su duración en su adicción es bueno ver que Dr. Robotnik’s Mean Bean Machine nos ofrece 3 modos de juego principales. En el primero tendremos que ir derrotando a los robots hasta llegar a Robotnik, en el segundo podremos competir contra otro jugador a duelos, y el tercero es el típico modo de “juego libre” donde podemos jugar hasta que nos maten (tanto a uno, como a 2 jugadores).

Además de esto el juego nos ofrece varios niveles de dificultad para adaptarlo a nuestra habilidad y la posibilidad de continuar el modo principal con passwords, vamos que hay juego para rato.

Robotnik y sus secuaces

 

Conclusión

Dr. Robotnik’s Mean Bean Machine (o Puyo Puyo) es un juego de puzle muy adictivo y entretenido, pero que puede llegar a desesperar a los que no sean muy hábiles en el género. Recomendado a los fans de los puzles que tengan aburrido el Tetris y el Columns.

A punto de perder la partida

Deja un comentario