Análisis: Beetlejuice (NES)

BEETLEJUICE

por NesBeer

Beetlejuice NES (0)

 

Este comentario está sacado de la revista Bonus Stage Magazine número 09 que puedes ver online o descargar gratuitamente  aquí.

Título: Beetlejuice

Plataforma: NES

Número de Jugadores: 1 jugador

Género: Plataformas/Aventura

Desarrolladora: Rare

Año: 1991

Rare hoy por hoy es muy conocida por ser una de las empresas más destacadas e innovadoras, especialmente por los grandes juegos que creó durante su etapa de máxima gloria en Super Nintendo y Nintendo 64, y por su etapa inicial bajo el nombre Ultimate Play The Game. Pero durante la era de los 8 Bits, antes de que apareciera el “salvador de reputación” Battletoads, esta compañía se impuso crear muchos títulos en poco tiempo, lo que dio resultado a una enorme cantidad de títulos mediocres y unos pocos decentes como la no tan conocida saga Wizard and Warriors exclusiva de NES, y títulos singulares como R.C. Pro-Am, Solar Jetman, Captain Skyhawk y un port decente de Marble Madness, entre los que más podría destacar.

Por supuesto que esta horrible adaptación de videojuego basado en una excelente película de Tim Burton no es la excepción de llevarse el apodo de mediocre, pese a que mi avatar en la revista está representado por el simpático personaje de este juego, y a que haya salido un título que salió el mismo año que Battletoads, por lo que es quizás uno de los últimos títulos mediocres que desarrolló Rare en NES, antes de su hasta entonces muy exitoso futuro.  

No es extraño que LJN, la empresa famosa por ser la responsable de publicar un alto número de horribles adaptaciones de películas a videojuegos para NES, también se haya encargado de Beetlejuice.

Gráficos

Distan de ser malos, pero tampoco es que se destaquen. Las imágenes fijas de los personajes están muy bien logradas y recuerdan mucho a los de la película. Cada nivel es muy diferente de otro, pero al mismo tiempo tienen un diseño monótono, y carecen de fondos destacados.

La peor parte tal vez se la lleven los sprites de los enemigos y  hasta el propio “Betelgeuse”, que no parecen haber sido trabajados con muchas ganas, e incluso los jefes tampoco tienen un diseño para destacar, en general parecen otro enemigo del montón. Tal vez, la serpiente sea la excepción de esto, pero les digo la verdad, estoy muy seguro que solo unos pocos la hemos podido ver, porque el juego desde el principio da la sensación de no querer ser jugado y nos invita inmediatamente a lanzar el cartucho por la ventana. Si son respetables las transformaciones que tiene nuestro personaje para realizar sustos, son todas muy variadas entre sí (refiriéndonos al diseño, claro) y nos van a traer recuerdos de la película.

Pantalla de título

Pantalla de título

Sonido

Los efectos de sonido pasan casi desapercibidos, y poco se puede decir de ello. Para su suerte, Rare siempre contó en sus filas con el genio de David Wise (compositor de la mayoría de los juegos de la empresa, en donde ganó una enorme fama por sus trabajos realizados en Donkey Kong Country de Super Nintendo).

La música de Beetlejuice es por lejos lo mejor del juego. Cada nivel tiene su propia melodía, y existe una especial para la pantalla de presentación del juego y una en particular cada vez que entramos a una tienda. Pero lo mejor del juego fue totalmente arruinado, y el problema esta en que estas melodías se repiten una y otra vez hasta el punto de hartar, encima cada vez que perdemos o salimos de una tienda la melodía empieza desde 0. No creo que esto sea por culpa de David Wise, teniendo en cuenta de que cada una dura aproximadamente unos 45 segundos o incluso más tiempo.

Jugabilidad

El apartado jugable es terriblemente malo en todos los sentidos. Desde el principio ya nos damos cuenta de que los saltos son algo imprecisos y que por ende necesitaremos mucha práctica para poder dominarlos. El juego se desplaza libremente de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo. Esto estaría muy bien, pero cuando queremos bajar tenemos que tener si o si una plataforma a la vista porque si nos lanzamos por el aire con la intención de aterrizar en algún lugar que no se ve, por más que este exista, morimos instantáneamente al chocar con el aire.

El ataque estándar de nuestro protagonista es el pisotón, pero solo sirve para unos pocos enemigos como unos pequeños escarabajos, por lo que es uno de los mas inútiles de todo el catálogo de NES. Los demás enemigos será mejor evitarlos, por lo que no es raro que pasemos casi todo el juego esquivando enemigos, ya que el mínimo contacto con ellos significa un golpe en contra nuestra. Betelgeuse tan solo puede aguantar 2 golpes, así que el reto principal es tratar de esquivar todo como loco tratando de recibir el menor daño posible, y todo esto con un control terrorífico.

La jugabilidad es algo incómoda

La jugabilidad es algo incómoda

El juego se maneja más que nada con un extraño y poco comprensible sistema de dinero que aparentemente vamos recolectando a medida que matamos a unos enemigos determinados que se encuentran en una especie de agujeros que nos llevan a un mini-nivel subterráneo y a los pequeños insectos. Podemos entrar a unas tiendas repartidas en varios puntos de los diferentes niveles, en donde podemos comprar una mascaras que vendrían a ser los sustos (¿En serio? ¿Betelgeuse tiene que comprar sus propios sustos? No recuerdo que en la película haya sido así). Estos son vitales para acabar con la mayoría de los enemigos, los jefes, y en algunos casos para poder avanzar por algunos lugares inaccesibles. Una vez comprados,  pueden ser seleccionados en un menú insoportablemente incómodo de usar, y el uso de estos es extremadamente limitado. Si compramos un susto 6 veces y lo seleccionamos para usar, el uso de este cuenta como uno, por lo tanto tenemos que volver a seleccionarlo una y otra vez si lo queremos usar nuevamente. Por supuesto que la variedad entre esto sustos es prácticamente nula sin una diferencia real entre ellos, más allá del diseño como había mencionado anteriormente.

A modo de descanso del horripilante sistema jugable, una vez que llegamos a la mansión, el juego cambia radicalmente tomando una vista aérea, pudiendo movernos hacia cualquier dirección en donde tendremos que, una vez más, ir esquivando los enemigos como sea posible, y recolectar ciertos items para poder ir avanzando. Tal vez esta etapa sea la que más recuerdos nos traerá de la película ya que es muy fiel a ella, pero de todos modos no deja de ser espantosa y aburrida.

También una puerta mágica vendrá hacia nosotros, y nos trasladará directamente a una zona mágica en donde se encuentra la serpiente que más atrás he mencionado. Para salir de este nivel especial, si o si tendremos que vencer a la serpiente. En sí, el juego tiene una dificultad algo elevada, y cada nivel es un reto aparte. También, es muy fácil quedarse atascado en algunas zonas sin saber qué hacer, sumando que es un juego muy frustrante por errores en el diseño. A veces tenemos que abrir un interruptor o encontrar una llave para poder abrir una puerta, pero otras veces simplemente tenemos que vagar libremente hasta encontrar la salida al próximo nivel, dando a entender que los programadores tuvieron una enorme dejadez a la hora de desarrollar los niveles de este juego.

Duración

5 minutos: Es lo que como mucho durarán jugando este juego. Si alguien medio sadomasoquista quiere completarlo, probablemente le tome mucho tiempo, ya que es bastante complicado, y algunos niveles (como el de la mansión) son un poco largos.

El nivel de la mansión es prácticamente un juego distinto

El nivel de la mansión es prácticamente un juego distinto

Conclusión

Si uno se sienta a hurgar y analizar detenidamente, nos damos cuenta de que la idea de un juego de plataformas a medias con una semi-libertad de movernos para cualquier lado, un sistema de compra de sustos que lamentablemente se le puso muy poco esfuerzo, y cierta variedad en los niveles, no hubiera estado para nada mal si se hubiera implementado bien, sin apuro y con mayor esfuerzo en su diseño, pero cada apartado de Beetlejuice que tranquilamente pudo ser bueno, es siempre arruinado por cosas ridículas, que hasta da la sensación de que sea extraño que la empresa que estuvo detrás de este juego haya sido Rare. Cuando encontramos algunas escenas del juego que nos traen un fiel recuerdo a la película de Tim Burton, luego inmediatamente aparece algo que lo desvía totalmente. Lamentablemente Beetlejuice no es más que otro intento de ganar dinero desesperadamente a partir del nombre de una excelente película, con un juego con un desarrollo pobre creado con prisas, que se suma al enorme catálogo de juegos malos para la consola de 8 Bits de Nintendo.

Además de sustos podemos comprar vidas

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